Se presenta en Barcelona, Palma, Porto Cristo y Manacor a lo largo del mes de abril, “Una droga llamada Helen, (otra) película rodada en Mallorca”, nuevo libro de Antoni Ferrer Vallespir. Un nuevo libro de Es Cau edicions verá la luz estos próximos días, se titula “Una droga llamada Helen, (otra) película rodada en Mallorca” y es su autor Antoni Ferrer Vallespir.

La obra es un exhaustivo repaso a través de lo que se denomina vaciado de hemeroteca de una de las películas menos conocidas de las filmadas en el archipielago balear, Una droga llamada Helen, desde que se empezó a rodar en el Eurotel de Costa de los Pinos en setiembre de 1969 hasta su estreno en el Palacio Avenida de Palma el 14 de setiembre de 1971 y meses más tarde en la Sala Imperial de Manacor el 2 de marzo de 1972, y lo que ha quedado de ella en el transcurso del tiempo.

Sobre el cine filmado en Mallorca. Se suele calificar a Mallorca como un gran plató de cine. Un lugar ideal para filmar gracias al paisaje, al clima y a toda la infraestructura necesaria, tanto técnica como humana, concentrada en un reducido espacio. A lo largo del siglo XX y lo que llevamos del XXI muchas han sido las películas que se han rodado, en parte o en su totalidad, en nuestra isla, aunque para la memoria colectiva hay un título indisolublemente unido a Mallorca: la obra maestra de Luís García Berlanga, El Verdugo (1963). Obvio es decir que también hay otras películas que han formado parte, en mayor o menor medida, del imaginario popular como El secreto de la Pedriza de Francisco Aguiló (1925),

Tempestad en el alma de Juan de Orduña (1949), Jack, el negro, de Julien Duvivier y José Antonio Nieves Conde (1950), Bahía de Palma de Juan Bosch (1962), La mujer de paja de Basil Dearden (1964), El mago de Guy Green (1968), Un invierno en Mallorca de Jaume Camino (1969), Krakatoa, al este de Java de Bernard J. Kowalski (1969), Muerte bajo el sol de Guy Hamilton (1982), Bearn de Jaume Chavarri (1983), La señora de Jordi Cadena (1987) sin olvidarnos, tampoco, de las más recientes como La Caja Kovak de Daniel Monzon (2006), Cloud Atlas de Tom Tykwer, Lilly Wachowski y Lana Wachowski (2013), Verano rojo de Carles Jofre (2017), o Pan de limón con semillas de amapola de Benito Zambrano (2020) además de las modestas y muy peculiares producciones de los cineastas mallorquines Martín Garrido, padre e hijo, etc.

Sobre Una droga llamada Helen, la película. Pocos son los estudios que analizan el cine rodado en nuestra isla que citan a Una droga llamada Helen, una coproducción entre España, Italia y Francia filmada en el último trimestre de 1969 en Mallorca, principalmente en Palma, Formentor y el levante de la isla (Porto Cristo, Artà, Cala Ratjada, etc). La película fue dirigida por el italiano Umberto Lenzi y protagonizada por la norteamericana Caroll Baker y el francés Jean Sorel además de Anna Proclemer, Marina Coffa, Luís Davila, Alberto Dalbes y, en un pequeño papel, el manacorí Gaspar Forteza. Calificada por el propio realizador como un thriller con claras influencias del cine negro francés de la época, como Las Diabólicas, A pleno sol o La piscina, en Italia, en cambio, la encasillan como una precursora del giallo, la variante italiana del thriller, del que es el máximo exponente Dario Argento con su trílogia compuesta por El pájaro de las plumas de cristal (1969).

El gato de las nueve colas (1971) y Cuatro moscas sobre terciopelo gris (1972) consideradas como giallos en estado puro. Se denomine como policiacas o poliziescos, thriller, el polar-noir francés, el kriminal germano o giallo, la realidad es que Una droga llamada Helen ha sido siempre una de las grandes olvidadas entre el cine rodado en Mallorca, o bien por su escasa relevancia cinematográfica o bien por la polémica que surgió al principio del rodaje cuando su director, Umberto Lenzi, se enfadó por una crónica firmada por el periodista Xim Rada que se publicó en Diario de Mallorca. El enfado motivó que algunos medios informativos quedaran vetados del día a día de la filmación.

Sobre el libro. Este libro quiere contribuir a corregir una injusticia histórica y rescatar del olvido una película que, actualmente, pocos son los que se acuerdan de ella y, lo que es peor, que a nadie o a casi nadie parece importarle. La obra tiene como base un trabajo que se publicó en la revista Perlas y Cuevas de Manacor en 2003, trabajo que ha sido ahora revisado, adaptado, actualizado y ampliado por su propio autor.

Más sobre la película. Una droga llamada Helen no es un buena película, ni lo fue antes, ni lo es ahora, ni lo será nunca. Pero si es muy representativa de un tipo de cine de género que se hizo por Italia y España a lo largo de las décadas de los sesenta y setenta del pasado siglo. Un tipo de cine y una industria del que su director, Umberto Lenzi, fue fiel y leal servidor. Lo que si se puede garantizar es que la Mallorca que fotografia esta película luce bien en la pantalla.